Entry/Exit obligará a detener vehículos, pero el Gobierno confía en un convenio con España y Francia para evitar un colapso en la frontera

El presidente del grupo parlamentario de Demòcrates per Andorra, Jordi Jordana, aseguró este viernes que la situación ante los futuros controles sistemáticos en la frontera derivados del Entry/Exit System (EES) es «preocupante», pero pidió evitar «alarmismos innecesarios» mientras Andorra negocia un convenio con España y Francia para suavizar sus efectos.

El debate se ha intensificado tras las advertencias del conseller Víctor Pintos, que alertó de que la aplicación estricta del EES podría implicar detener cada vehículo para registrar los datos de cada pasajero, incluidos los que solo transitan desde países Schengen.

“No hay que ser alarmista”

Según Jordana, «este es el desasosiego que existe», pero insistió en que el Govern está haciendo «lo que se tiene que hacer» para evitar un escenario de colapso fronterizo.

«Se está negociando un convenio y en los próximos días tendremos una reunión del pacto de Estado donde se explicará cuál es la situación. Creo que al menos para esta temporada no habrá problema», afirmó.

El parlamentario recordó que incluso responsables policiales españoles han señalado recientemente que, esta temporada, la aplicación del sistema «no sería tan radical».

¿Por qué podría colapsar la frontera?

El futuro sistema europeo obliga a registrar foto, datos biométricos y fecha de entrada y salida de todos los ciudadanos extracomunitarios que acceden al espacio Schengen.

El problema, según fuentes policiales, es que:

• La Policía andorrana no puede saber a simple vista si en un coche español o francés viajan pasajeros extracomunitarios.

• El control debe ser persona por persona, independientemente de la matrícula del vehículo.

• También debe verificarse si los viajeros han superado o no el límite de 90 días dentro del espacio Schengen.

Aplicados literalmente, estos requisitos obligarían a parar cada vehículo e identificar a todos los ocupantes, un proceso incompatible con el volumen real de tráfico en las fronteras andorranas.

Lo que exige el EES

El Sistema de Entry Exit (EES) de la UE no añade requisitos nuevos para los viajeros, pero sí obliga, al cruzar una frontera exterior del espacio Schengen, a registrar datos biométricos: una imagen facial y, si el viajero no requiere visado, cuatro huellas dactilares. Además, se debe disponer de un pasaporte válido y respetar la normativa de estancia máxima de 90 días cada 180.

El proceso consiste en escanear el pasaporte, recoger los datos biométricos y verificarlos en las bases de datos europeas. Los pasaportes biométricos pueden permitir autoservicio en algunos puntos. El sistema excluye a los menores de 12 años y no se aplica en Irlanda ni en Chipre.

Por otra parte, aunque el EES no introduce la obligación de presentar un billete de vuelta, este requisito ya existe para los viajeros extracomunitarios en países como España. Es imprescindible para justificar el motivo turístico de la visita y acreditar la intención de abandonar el territorio.

Requisitos generales para entrar al espacio Schengen

• Pasaporte válido: con validez mínima de tres meses tras la fecha prevista de salida.

• Billete de ida y vuelta: documento clave para justificar el propósito del viaje.

• Medios económicos: acreditar fondos suficientes para toda la estancia.

• Alojamiento: justificar dónde se alojará el viajero (hotel, Airbnb o carta de invitación).

• Visado: si es obligatorio según el país de origen.

• Seguro de viaje: recomendable para cubrir emergencias médicas.

Confianza en un convenio con los vecinos

Jordana insistió en que la prioridad del Govern es firmar un convenio con España y Francia que permita gestionar los controles de forma ágil, sin tener que aplicar el protocolo más duro previsto por Bruselas.

«Esperamos que la próxima temporada la situación esté estabilizada gracias a un acuerdo que evite los controles sistemáticos», defendió.

Por ahora, pese a la incertidumbre, el bloque demócrata asegura que el Govern «mantiene el ritmo y las conversaciones necesarias» para proteger la fluidez fronteriza, un elemento esencial para el turismo y la economía del país.

Un “problema grave” según Pintos: riesgo real de colas kilométricas

Hace unas semanas, el conseller del grupo parlamentario de Ciutadans Compromesos y miembro de Liberals d’Andorra, Víctor Pintos, ya advertía que el EES podría convertirse en «un problema grave para el país». Según él, la aplicación estricta del control sistemático «podría provocar grandes colas» y alterar profundamente la movilidad cotidiana en el Pas de la Casa y en la Farga de Moles.

Pintos recordaba que Andorra, como país tercero fuera de Schengen, ha disfrutado hasta ahora de un trato más flexible gracias al acuerdo de 1991, que permitía un paso fronterizo relativamente fluido mediante controles aleatorios. Pero ahora el contexto europeo ha cambiado:

«Debido a los problemas de inmigración en toda Europa, estos controles se han vuelto más exigentes y España prevé un control sistemático.»

El conseller fue contundente:

"Si hay control sistemático en la frontera, sería un desastre"

Por ello, explicó que se están negociando mecanismos para mantener un sistema aleatorio y no sistemático, como hasta ahora. La entrada en vigor del EES en abril, advertía, podría ser «altamente problemática» si no se logra suavizar estas exigencias.

Inquietud creciente entre empresas y trabajadores

En declaraciones a La Veu Lliure, Pintos explicó que diversas empresas del país ya empiezan a percibir el riesgo y han expresado preocupación sobre cómo los nuevos controles podrían afectar la movilidad laboral, el suministro de mercancías o los flujos turísticos.

«Es una inquietud que tenemos todos, y es tan realista que veremos en los próximos meses cómo evoluciona», afirmó.

Con la temporada de invierno en marcha y el proceso de negociación aún abierto, la presión recae sobre el Govern y los grupos parlamentarios para garantizar que el EES no colapse la frontera ni ponga en peligro la actividad económica que sostiene el país.

Acuerdo de gestión de fronteras con la UE antes de final de año

La ministra de Justicia e Interior, Ester Molné, confía en que el acuerdo de gestión de fronteras con la Unión Europea se cerrará antes de final de año.

Así lo anunció durante la apertura del 23º Foro de Empresa Familiar Andorrana. Según la ministra, «la negociación está muy avanzada» y, a su juicio, «podremos firmarlo, si todo va bien, antes de finales de año».

Tal como explicó Molné, esto está «estrictamente vinculado» al hecho de haber finalizado la negociación del acuerdo de asociación, lo que hace que ya se considere a Andorra como un Estado aliado y no un tercer país.

«Este acuerdo con la Unión Europea también establece mecanismos de cooperación policial transfronteriza con los dos Estados vecinos para luchar más eficazmente y de manera mucho más coordinada contra la delincuencia transnacional», detalló.