Malestar empresarial por el cierre repentino de la cuota de asalariados

Empresarios y sectores productivos de Andorra han recibido por sorpresa y con preocupación el anuncio de que la cuota para la contratación de asalariados en el país se ha agotado y que la próxima ventana para nuevas contrataciones no se abrirá hasta octubre.

El aviso, difundido este miércoles, indicaba textualmente: “Només per informar-vos que avui s’ha acabat la quota per a la contractació d’assalariats a Andorra. Això suposa que no es poden presentar nous expedients fins que no s’obri una nova quota d’immigració”. La medida, que se aplica automáticamente al agotarse la cuota disponible, seguirá el mismo sistema que se emplea para trabajadores temporeros o autónomos con reservas de cuenta propia: una vez agotada la capacidad, no se aceptan nuevas solicitudes hasta la próxima convocatoria.

La noticia ha generado gran malestar entre empresas de diversos sectores, especialmente aquellas que dependen del refuerzo inmediato de mano de obra extranjera. 

“Aguantamos porque aguantamos, pero en algún momento ya no se podrá. Es imposible producir sin recursos humanos”, asegura un empresario del sector industrial consultado por este medio.

Para perfiles profesionales altamente cualificados, que pueden acogerse a la vía de human capital o a un traslado voluntario de residencia, la situación es relativamente asumible. 

Sin embargo, para empresas productivas con necesidades urgentes de contratación, la medida representa un verdadero obstáculo operativo, que podría afectar la producción y los plazos de entrega en los próximos meses.

La próxima ventana de contratación está prevista para octubre, según fuentes oficiales. Mientras tanto, empresas y trabajadores deberán gestionar la situación con los recursos disponibles, ajustando proyectos y prioridades. La incertidumbre también afecta a potenciales trabajadores que planeaban trasladarse a Andorra, generando un clima de incertidumbre y retrasos en la incorporación laboral.