León XIV reivindica “la vida como un don” mientras Andorra y el Vaticano negocian la despenalización del aborto

En una Plaza de San Pedro llena de fieles, el Papa León XIV ha continuado este miércoles su ciclo de catequesis del Jubileo 2025, centrado en “Jesucristo, nuestra esperanza”. 

El Pontífice ha profundizado en el sentido cristiano de la vida y en la necesidad de custodiarla “como un regalo”, en un momento en que Andorra mantiene abiertos los contactos institucionales con la Santa Sede sobre el proceso de despenalización del aborto.

Durante la audiencia general, León XIV ha alertado sobre “una falta de confianza en la vida” que se propaga en muchas sociedades contemporáneas. Ha hecho un llamado a redescubrir la existencia como “un don que se recibe, no una amenaza”, y ha insistido en la importancia de generar vida en todos los ámbitos: familiar, comunitario, social y espiritual. “El valor de vivir y de generar vida es hoy más que nunca un clamor urgente”, ha señalado.

Andorra y la Santa Sede mantienen el diálogo

El mensaje del Papa llega en un contexto sensible para el Principado. Hace apenas un mes, el jefe de Gobierno, Xavier Espot, y el ministro de Relaciones Institucionales, Ladislau Baró, acompañados por el embajador Carles Álvarez, se reunieron en el Vaticano con el secretario de Estado, el cardenal Pietro Parolin, para avanzar en el diálogo sobre la despenalización del aborto.

Esta línea de diálogo llegó una semana después del encuentro en el Consell General, donde los grupos políticos mantuvieron un debate intenso.

La consejera de Concòrdia, Núria Segués, ha expresado su frustración: “Llevamos dos años y siempre que hablamos de esto damos vueltas”. Ha reclamado concreción respecto a lo que se habló en la última reunión con Parolin.

En respuesta, Ladislau Baró defendió el trabajo diplomático y rebatió las afirmaciones de Segués: “No puedo permitir que usted afirme esto porque no es verdad. Precisamente venimos de una reunión en la Santa Sede para tratarlo. Hemos ido a buscar una definición de escenario que nos permitiera avanzar, no a comer pizza”.

¿Ruptura de la discreción?

El ministro admitió, con autocrítica, que pecó de optimismo respecto a los plazos: “Estaba convencido de que en noviembre tendríamos el debate encarrilado. Lo comuniqué… un poco atrevidamente. A veces el optimismo te hace ir más lejos de lo que deberías”. Aun así, reiteró que el objetivo es llevar el texto al debate “tan pronto como sea posible”, ahora con diciembre como nueva referencia.

Baró explicó que la reunión en el Vaticano ha sido clave para identificar “los nudos de dificultad” y que el escenario ha cambiado desde las conversaciones de febrero con Imma Tor y Monseñor Gallagher. El texto preparado por Federico de Montalvo, por tanto, deberá esperar. “No podemos avanzar solo con voluntarismo o ilusión”, advirtió.

El ministro también insistió en que no hay ninguna maniobra dilatoria: “No estamos defendiendo un planteamiento patriarcal para retrasarlo. La voluntad es avanzar, y lo hemos demostrado”.

Baró dijo que el cardenal Parolin ya expuso en 2023 los estrechos límites entre la Constitución, la doctrina de la Iglesia y los derechos reproductivos de las mujeres. “Son complejidades que hay que abordar con calma y discreción”, insistió.

Según recoge el diario especializado InfoVaticana, en paralelo, el Papa León XIV, en su catequesis de hoy, destacó que la Resurrección de Cristo es “la fuerza que sostiene al creyente ante las tinieblas” y que el mensaje cristiano pide “promover la vida en todas sus expresiones”.

Unas palabras que, inevitablemente, resuenan en medio del debate andorrano, aunque el Vaticano y el Gobierno mantienen el compromiso de trabajar “de manera constructiva” para presentar un texto legislativo el próximo año.

Tal como dijo la ministra Tor en su discurso para presentar el informe nacional, quien recordó ante el Consejo de Derechos Humanos que el Gobierno contempla despenalizar la interrupción voluntaria del embarazo durante esta legislatura, con un proyecto de ley que presentará al Consell General en los próximos meses. 

De hecho, hasta que el Govern no tenga la convicción de que cualquier propuesta respeta las líneas rojas de la institución andorrana, Baró ha dejado claro que no se abrirá el debate público: “Cuando tengamos elementos cualitativos suficientes, lo llevaremos a todos los grupos. La prioridad es proteger el sistema institucional”.

El mensaje es claro: mientras Roma y Andorra continúan negociando con discreción, la reflexión del Papa León XIV sobre el valor de la vida llega en un momento de alta sensibilidad política en el Principado.