Carlos Mur niega haber huido a Andorra de la justicia española
Mur afirma que su llegada a Andorra responde únicamente a la voluntad de “reconstruir la vida profesional y personal”

El psiquiatra Carlos Mur, que ocupó un puesto clave en la gestión sociosanitaria de la Comunidad de Madrid durante la primera ola de la Covid-19, ha afirmado este miércoles en RTVA que “no descarta que hubiera negligencias” en las muertes de cientos de mayores en las residencias madrileñas. Mur ha participado en el programa Avui Serà un Bon Dia, donde ha repasado su trayectoria y su presente en Andorra.
Según Mur, la falta de profesionales fue “un factor determinante” en aquellos momentos críticos, aunque defendió que el contexto era de colapso e incertidumbre. También ha remarcado que no mantiene “ninguna relación con autoridades políticas desde hace años” y que su papel durante la pandemia fue eminentemente técnico.
Su salida del SAAS
Sobre su etapa reciente en el SAAS como jefe del servicio de Salud Mental, Mur ha explicado que su salida fue “una dimisión voluntaria y pactada”, añadiendo que “no estaba muy contento dentro del SAAS”.
Según él, “se ha vendido un relato equivocado e interesado” sobre las circunstancias de su marcha, y ha querido dejar claro que no fue forzado a abandonar el cargo.
Reconstruir la vida en Andorra
Actualmente, Mur intenta rehacer su vida profesional como psiquiatra en el Principado. Preguntado por las acusaciones que lo vinculan a la gestión de protocolos polémicos en Madrid, ha querido rechazar de pleno la idea de que se refugiara en Andorra para esquivar la justicia española.
“En ningún caso yo escaparía de ningún tipo de respuesta judicial”, ha declarado, subrayando que no tiene nada que ocultar y que está dispuesto a responder ante los tribunales si es necesario.
Sus declaraciones llegan en un momento en el que su trayectoria continúa siendo objeto de debate, especialmente por las consecuencias de la gestión de la pandemia en el ámbito residencial. Aun así, Mur insiste en que su prioridad es volver a ejercer con normalidad como psiquiatra y desvincularse de cualquier connotación política.