Los Propietarios de Andorra piden revisar y aplazar la descongelación de los alquileres

La Asociación de Propietarios de Bienes Inmuebles de Andorra ha expresado su preocupación ante el borrador del proyecto de ley sobre el régimen jurídico de los arrendamientos de vivienda para el período 2027-2032.

Aunque la propuesta se presenta como una “descongelación” del mercado, la entidad considera que no supone una verdadera desintervención, sino la prolongación de medidas que no han resuelto los problemas estructurales del alquiler.

Crecimiento demográfico y falta de oferta

Según la Asociación, el fuerte crecimiento demográfico de los últimos años —con más de 2.000 nuevos residentes en el último año— no ha ido acompañado de un incremento proporcional de la oferta de vivienda en alquiler, lo que ha generado una presión creciente sobre la demanda.

“Las políticas de vivienda no pueden basarse únicamente en el control de precios, sino que deben abordar las causas estructurales de la falta de oferta”, señalan desde la entidad.

Rentabilidad y rigidez: el problema de los contratos actuales

Los datos del sector indican que aproximadamente el 80% de los contratos de alquiler vigentes tienen rentas de entre 500 y 1.000 euros mensuales, correspondientes mayoritariamente a viviendas alquiladas desde hace años y sometidas a congelaciones o incrementos muy limitados.

La Asociación subraya la diferencia existente entre los precios anunciados en los portales inmobiliarios y las rentas reales de los contratos, ya que los primeros solo reflejan una parte minoritaria del parque, generalmente viviendas nuevas o recientemente reformadas.

El proyecto de ley contempla incrementos muy restringidos y condicionados, sin tener en cuenta el aumento real de los costes de mantenimiento y conservación. Según los propietarios, esta situación puede afectar a la rentabilidad de los inmuebles y desincentivar la inversión.

Riesgo para los pequeños propietarios

La Asociación alerta también del riesgo de una dualización del mercado del alquiler, con:

• Un segmento con rentas muy bajas y escasa movilidad.

• Un mercado de entrada reducido, con precios elevados, destinado principalmente a nuevos residentes.

Este escenario genera desigualdades en el acceso a la vivienda y tensiones persistentes. Además, la vinculación de los incrementos a contratos de larga duración introduce rigidez y aumenta el riesgo para los propietarios, especialmente para los pequeños, desincentivando la incorporación de nuevas viviendas al mercado.

Llamamiento a la revisión y aplazamiento del proyecto

Aunque la Asociación comparte la necesidad de que el Estado garantice una red de protección para las personas con dificultades de acceso a la vivienda, recuerda que muchos propietarios son familias o pequeños ahorradores que ya han asumido durante años congelaciones y limitaciones en las rentas.

En este contexto, la entidad pide revisar el contenido del proyecto y aplazar su aplicación para evitar efectos contraproducentes sobre la oferta y la estabilidad del mercado del alquiler.