El segundo pilar gana fuerza en Andorra: el modelo que puede garantizar el futuro de las pensiones

El sistema de pensiones de Andorra entra en una fase decisiva de reforma con la propuesta de introducir un segundo pilar de capitalización individual que complemente el actual modelo de reparto.

El segundo pilar es un sistema de previsión social complementaria que funciona con aportaciones individuales que se capitalizan a lo largo de la vida laboral. Este modelo permite que los trabajadores, con el apoyo de la empresa y la gestión pública, construyan un fondo propio que complemente la pensión pública del primer pilar.

Mirada a Suiza

El sistema suizo de Previsión Profesional ofrece prestaciones de jubilación, viudedad, orfandad e invalidez. Cada empresa puede ampliar las condiciones mínimas establecidas por la ley. Algunos trabajadores pueden tener más de una cuenta o capital, según las cotizaciones obligatorias o voluntarias.

En Suiza, los trabajadores solo aportan un 12,8%, aunque el país cuenta con uno de los mejores sistemas de pensiones del mundo. La clave es su modelo de tres pilares —público, profesional y privado— que combina reparto y capitalización, diversifica riesgos y garantiza que los jubilados ingresen cerca del 60% de su salario previo. En Suiza, la pensión estatal solo cubre entre un 16% y un 31% del salario medio, y el resto se complementa con ahorro obligatorio y voluntario, haciendo el sistema más estable frente a crisis y envejecimiento demográfico.

Según han explicado representantes de Demòcrates per Andorra y Andorra Endavant, el objetivo es avanzar hacia un modelo similar, donde cada trabajador tenga una cuenta propia, pero con mecanismos de solidaridad para evitar desigualdades.

Además de las reformas estructurales, se están estudiando medidas paramétricas como el aumento de las cotizaciones, la extensión progresiva de la edad de jubilación y la definición de topes de pensiones máximas y mínimas, con el objetivo de garantizar la sostenibilidad del sistema a largo plazo.

Según Jordana, “ahora se trata de centrarnos en preparar el texto con las líneas que creemos adecuadas”, después de varias conferencias técnicas sobre posibles modelos.

Las pensiones, en datos

Según los datos de la CASS, los ingresos por cotizaciones destinados a la rama de jubilación han crecido un 7,8%, sumando 107,5 millones de euros, con aportaciones adicionales de 3 millones de euros de prestaciones económicas y 3,5 millones transferidos por el Gobierno para pensiones no contributivas.

Los gastos en pensiones de jubilación han aumentado un 12%, con las pensiones contributivas ascendiendo a 90,5 millones de euros (+12,6%), mientras que las pensiones no contributivas han bajado ligeramente hasta 3,5 millones de euros (-2%).

El número de pensionistas de jubilación ha crecido un 4,8% respecto a 2024, hasta 18.027 personas, de las cuales 16.319 son de jubilación y 3.587 de viudedad (incluyendo 75 temporales). La tasa de dependencia se mantiene en 2,97 asegurados activos por cada pensionista, ligeramente inferior a la registrada el año anterior.