El FC Andorra sancionado con 15.000 euros y ahora sin estadio

El Comité de Disciplina de la RFEF emitió este martes su resolución definitiva sobre los incidentes ocurridos en el túnel de vestuarios tras el partido entre el Andorra FC y el Mirandés, hace una semana. El club andorrano ha sido multado con 15.000 euros y dos de sus representantes han sido sancionados disciplinariamente, según ha avanzado Mundo Deportivo.

El director general, Jaume Nogués, deberá cumplir 15 días de sanción, mientras que el delegado del primer equipo, Carles Manso, ha sido suspendido dos partidos, ambos por infracciones recogidas en el artículo 124 del Código Disciplinario, que hace referencia a "actitudes de menosprecio hacia los árbitros".

El informe arbitral del colegiado Alonso de Ena Wolf describe escenas de tensión e insultos tras el pitido final. Según consta en el acta, Nogués se dirigió de forma agresiva a uno de los asistentes con las palabras: "sois unos sinvergüenzas, esto es una vergüenza". A continuación, según el mismo documento, Gerard Piqué —propietario del club— se acercó "a escasos centímetros, gritando y con actitud intimidatoria, criticando las decisiones arbitrales".

El team manager, Carles Manso, también habría insultado gravemente al mismo asistente con expresiones como "hijo de puta, hijo de puta", según recoge el acta.

Además, el informe indica que Piqué y Nogués continuaron increpando a los colegiados, hasta el punto que la Policía tuvo que intervenir para separarlos: "En ese momento, D. Jaume Nogués Llorens y D. Gerard Piqué Bernabéu se acercaron a mi persona, formulando objeciones arbitrales en tono amenazante. En concreto, Nogués manifestó: ‘menuda vergüenza. No tenéis vergüenza’, a viva voz."

A pesar de la gravedad de los hechos, Gerard Piqué no ha sido sancionado, ya que, según el Código Disciplinario de la RFEF, el artículo 3 establece que sólo pueden ser sancionadas las personas federadas, condición que el propio propietario del club no cumple.

Paralelamente, la Federación Andorrana de Fútbol (FAF) ha decidido suspender temporalmente toda la actividad futbolística y cerrar todas sus instalaciones como medida de protesta contra el nuevo reglamento de cuotas para jugadores extranjeros.

Esta normativa, aprobada recientemente por el Gobierno, endurece los requisitos para la incorporación de futbolistas extracomunitarios, elevando especialmente de cuatro a seis años la experiencia previa exigida, aunque contempla una excepción para jugadores menores de 25 años.

Pese a esta contundente acción por parte de la FAF, el Ejecutivo ha remarcado que hasta ahora no ha recibido ninguna solicitud formal de la liga nacional para incorporar jugadores extracomunitarios y ha manifestado su malestar por el hecho de que la decisión se haya anunciado públicamente sin antes abrir un diálogo institucional.

El ministro portavoz, Guillem Casal, ha apelado a la cortesía y al clima de diálogo, reafirmando la voluntad del Gobierno de analizar la situación con la federación y hacer los ajustes necesarios si procede, pero siempre dentro de un marco de cooperación y no de confrontación pública.