Los comercios del Pas se resienten por los inesperados cortes en el acceso a Andorra

Los cortes de carretera en el sur de Francia derivados de las protestas de los ganaderos por la dermatitis nodular contagiosa están afectando directamente la afluencia de visitantes a Pas de la Casa. 

Especialmente a los turistas procedentes del lado francés, clave para la economía del núcleo de Encamp durante la temporada de invierno. Este fin de semana, las calles del Pas han registrado menos afluencia que en un fin de semana de invierno normal.

Según ha informado La Dépèche, la movilización de los agricultores en Ariège, tras el brote y el sacrificio de 207 vacas en Bordes-sur-Arize, ha provocado un corte casi total de la RN20 en Tarascon-sur-Ariège. 

Una centena de ganaderos han pasado la noche bloqueando la carretera, generando restricciones importantes para vehículos pesados, autobuses y autocaravanas, que solo pueden acceder a Andorra por rutas alternativas por los Pirineos Orientales. También el tráfico de turismos y motocicletas está muy limitado, mientras las autoridades recomiendan anticipar los desplazamientos y extremar la prudencia.

El presidente de la Cámara de Comercio, Josep Maria Mas, ha alertado de que “ya tenemos consecuencias”, señalando que la única carretera alternativa es difícil de transitar para autobuses. 

Visitantes que no han podido llegar a Andorra

De hecho, ya se han registrado casos de grupos de visitantes que no han podido llegar a Pas de la Casa, y muchos conductores particulares optan por no utilizar la vía alternativa, reduciendo aún más el flujo de turistas franceses.

“Es muy difícil compararlo con un fin de semana de invierno normal”, ha explicado Mas. A pesar de la presencia de visitantes durante la jornada, la situación vial condiciona el volumen de negocio. “Si la carretera estuviera abierta, probablemente trabajaríamos un poco más. Con la carretera cortada, parte del cliente no acaba viniendo”, ha añadido.

Pendientes de Francia

El presidente de la Cámara ha destacado que la situación es especialmente problemática en un fin de semana de temporada alta, cuando Pas de la Casa acostumbra a recibir cada vez más turistas franceses. “Hay mucha menos gente y nos falta sobre todo el cliente francés, que últimamente ha aumentado en temporada de invierno. Preocupa especialmente que esto se pueda prolongar en el tiempo.”

En cuanto a la duración del bloqueo, Mas ha subrayado que dependerá de las negociaciones entre ganaderos y autoridades francesas. 

“Si no llegan a una solución satisfactoria, es posible que las protestas continúen, y Andorra acabará pagando los platos rotos”, ha advertido. La falta de turistas franceses puede repercutir no solo en el comercio del fin de semana, sino también en eventos invernales como el NeuFest u otras actividades que dependen de visitantes franceses.