Irún desbanca a Andorra como destino preferido para llenar el depósito de los conductores franceses

Cada litro cuenta, y por eso muchas familias buscan formas de ahorrar algunos euros, ya sea comparando precios, aprovechando descuentos o desplazándose a otras localidades con gasolineras más económicas.

Históricamente, Andorra ha sido un referente en este ámbito. Gracias a una menor carga fiscal, el precio de los carburantes en el Principado solía ser más bajo que en el resto de la región, lo que atraía a numerosos conductores franceses y españoles. Sin embargo, según el diario francés La République des Pyrénées, ahora hay un nuevo destino que compite directamente con Andorra: la ciudad vasca de Irún.

Irún, el nuevo punto de ahorro

El medio francés destaca que Irún ofrece precios de combustible “significativamente más bajos” que en la Francia continental. Esta diferencia no solo afecta a las gasolineras, sino también a los supermercados y otros establecimientos comerciales, lo que ha impulsado a muchos residentes de Hendaya, San Juan de Luz o Bayona a cruzar la frontera para repostar y hacer compras en territorio español.

Según los cálculos publicados, las gasolineras de Irún venden la gasolina casi un 20% más barata que en Francia. En la práctica, esto supone un ahorro aproximado de 7 euros por un depósito de 50 litros, una diferencia considerable para quienes conducen con frecuencia.

Variaciones dentro de España

Aun así, cabe recordar que el precio del carburante en España no es homogéneo. Factores como la política fiscal de cada comunidad autónoma, los costes logísticos o la proximidad a una refinería pueden provocar oscilaciones notables entre estaciones de servicio, incluso dentro de una misma marca.

Además, estos precios fluctúan a diario. Actualmente, las gasolineras más baratas del país se encuentran en Córdoba, donde algunos establecimientos ofrecen gasolina a 1,26 euros el litro, mientras que en Madrid el precio puede alcanzar los 1,60 euros.

Con esta situación, Andorra pierde parcialmente su ventaja histórica como destino preferido para el “repostaje económico”, mientras que el País Vasco emerge como una nueva alternativa para los conductores franceses que buscan llenar el depósito sin vaciar el bolsillo.