“Tenemos un problema en el Pas, un niño no tiene por qué ver contrabandistas”
Espot matizó que hay que diferenciar entre realidad y percepción

La inseguridad vinculada al contrabando sigue generando preocupación en el Pas de la Casa, tanto entre los trabajadores como entre los vecinos y los comerciantes. Un trabajador de la zona explicó a este diario que la situación es incómoda tanto para los residentes como para los visitantes:
“No es agradable ver a un señor con bolsas corriendo hacia ti. Además, para los turistas tampoco debe de ser agradable; ven a gente corriendo y se quedan pensando qué pasa aquí”.
Aun así, este mismo testimonio reconoce la eficacia de las fuerzas de seguridad: “Cuando la policía los ve, los atrapa. Aquí la policía no se queda de brazos cruzados. He visto policías ser muy eficaces, no es tanto un aumento de los delitos como de situaciones esperpénticas que generan rechazo”.
El Gobierno toma cartas en el asunto
El jefe de Gobierno, Xavier Espot, admitió este martes en Avui serà un bon dia de Ràdio Nacional que “tenemos un problema en el Pas”.
Según Espot, la situación se concentra especialmente en la actividad de los contrabandistas: “Allí tenemos un problema de inseguridad por aquellos que se dedican al contrabando, y eso no toca aquí”.
El cap de Govern matizó que hay que diferenciar entre realidad y percepción: “No creo que haya aumentado la inseguridad porque no hay datos, pero sí aumenta la sensación y tenemos que actuar en el Pas de la Casa. Estamos obligados a anticiparnos”.
Para combatirlo, el Gobierno ha reforzado las patrullas mixtas con Francia, ha impulsado el cierre de negocios vinculados al contrabando de tabaco y ha aprobado modificaciones legales para controlar la venta de mercancías sensibles. Espot recalcó que “un niño que va a la escuela no tiene que cruzarse con contrabandistas; seremos contundentes”.
Desde la Asociación de Comerciantes y Vecinos del Pas de la Casa, Antonieta Vila también admite que se trata de “situaciones puntuales”, pero reclama más vigilancia para prevenir peleas y episodios incómodos: “Haría falta una vigilancia más intensa; hay suciedad, gritos y enfrentamientos en la calle”.