Francia elogia el plan de choque contra el contrabando de Andorra
L’ambaixador ha destacat la necessitat de mesures coordinades entre els governs per combatre el contraban
El embajador ha destacado la necesidad de medidas coordinadas entre los gobiernos para combatir el contrabando. El embajador francés, Nicolas Eybalin, ha elogiado en declaraciones a RTVA el plan de choque contra el contrabando en Andorra, que ha calificado de “lacra” porque, según ha subrayado, quienes lo llevan a cabo son grandes redes criminales.
Eybalin también ha querido recordar un accidente fatal provocado por un contrabandista de origen armenio que operaba en el Pas de la Casa, y que atropelló a dos mujeres mientras circulaba a gran velocidad, destacando los riesgos que esta actividad ilegal supone para la seguridad ciudadana.
El embajador ha resaltado la necesidad de medidas coordinadas entre los gobiernos para combatir el contrabando y ha señalado que el plan de choque es un paso importante para proteger tanto a la población como la legalidad en el Principado.
Francia pierde 4.300 millones por contrabando de tabaco
Del informe de la aduana francesa, adelantado por La Veu Lliure, se desprende que un 17,7% del tabaco consumido en 2023 no se adquirió en un establecimiento autorizado, lo que supone un agujero fiscal de 4.300 millones de euros. De esta cifra, casi el 80% corresponde a compras transfronterizas, especialmente en países como España, Bélgica o Andorra, donde los precios son significativamente más bajos.
“Es un juego de competencia fiscal a escala europea”, admite Christian Ben Lakhdar, coautor de un informe reciente de las aduanas francesas. Francia, dice, “aplica subidas más rápidas que sus vecinos, que acaban aprovechando la situación”.
Esta dinámica ha provocado que los volúmenes vendidos en los departamentos fronterizos hayan caído más de un 45% entre 2016 y 2023, mientras que en otras regiones la reducción ha sido inferior al 25%.
La factura es cada vez más difícil de asumir: un paquete cuesta actualmente entre 12 y 13 euros, y para muchas familias fumadoras supone un gasto mensual considerable. Algunos, como el chef Yannick, lo explican sin rodeos: “Con el poder adquisitivo que tenemos, es imposible mantener el ritmo. Al final, muchos vamos a comprar a España o a Andorra”.